Ampliación de El Viso, punto y final
Ampliación de El Viso, punto y final
Tras casi cinco años de trámites y procedimientos absurdos, Carmona ha triunfado contra la sinrazón.
En Enero de 2002, el Ayuntamiento de El Viso del Alcor acordó en Pleno que 5.154 hectáreas del término municipal de Carmona deberían de agregarse al suyo, pues, según su apreciación, era demasiado pequeño y con alta densidad demográfica; esto impedía su desarrollo y la solución a sus problemas estaba en aumentar su término a expensas de su colindante. No olvidemos que sólo en la provincia de Sevilla hay más de veinte municipios de menor extensión que el Viso del Alcor...
Un documento lleno de barbaridades e inexactitudes que, sin embargo, y ahí estuvo la primera arbitrariedad, la Junta de Andalucía admitió a trámite. Esto obligó al Ayuntamiento y a la Ciudad de Carmona a demostrar que su término era suyo. Semejante desvarío del Gobierno andaluz provocó un enorme esfuerzo para argumentar contra las pretensiones del Viso... cuando "la carga de la prueba" debiera habérsele exigido al Ayuntamiento visueño que era el promotor de este engendro.
Así la cosas, un expediente que hace más de dos años debiera haberse concluido, continuó un tortuoso camino lleno de despropósitos de toda índole, hasta llegar a pedirse al secretario del ayuntamiento de Carmona que certificara la autenticidad de los firmantes de los escritos que numerosos carmonenses habían suscrito. La Junta, para demostrar su prepotencia, se cubrió de gloria, incurriendo en irregularidades que en sentencias judiciales fueron anuladas... No había un sólo técnico, ni nadie mínimamente razonable, que diera crédito a la estafa política que se escondía detrás de toda esta iniciativa. Llegaron a idear en el Viso, los del PA, un lema que decía "más Viso" en un enorme cartel, a la salida del pueblo, y señalando hacia Carmona. Con cinco mil hectáreas tenían para todo, para comunicarse con todas las autovías y para recalificar terrenos a diestro y siniestro... Y las expectativas que la propia Junta les había alimentado fueron agigantándose hasta, por ejemplo, llegar al extremo de querer paralizar las obras de urbanización del parque logístico de Carmona con el argumento de que "a lo mejor en el futuro podrían ser parte del término municipal de El Viso"...
El miércoles 6 de Febrero, el Consejo de Gobierno, teniendo en sus manos desde años atrás un informe de la Dirección General de Urbanismo de la Junta que ya rebatía todas las pretensiones del ayuntamiento de El Viso del Alcor, y tras el informe negativo del mismo Consejo Consultivo de Andalucía, por fin desestimó esa solicitud... En palabras históricas, un término municipal como el de Carmona, definido por Alfonso X el Sabio, no podía ser pisoteado ni por Chaves, ni por un ayuntamiento vecino, ni por otras “maniobras orquestales en la oscuridad” de los procedimientos...
Y ahora vienen las reflexiones sobre este litigio finalmente resuelto (cualquier recurso o contencioso está destinado al fracaso y sería inútil):
Un municipio no puede basar su desarrollo en las expectativas fraudulentas que se sustentan en apropiarse de lo que histórica y legítimamente es de otro. Ese fue el gran error del PA en el Viso del Alcor, que aprendió la lección afortunadamente, tras su derrota electoral en las últimas municipales; aquella campaña no le sirvió para nada.
Un gobierno como el de Andalucía ha de ser ecuánime y ponderado; no valen artimañas encaminadas a fastidiar a ayuntamientos de color diferente; al final se imponen la razón y la legalidad. Dos varapalos judiciales y dos modificaciones legales de esta normativa han sido más que suficientes para que la propia Junta haya aprendido que tampoco le sirvió para nada cinco años de tortuoso procedimiento. No debió siquiera admitirlo a trámite.
Carmona no ha de jactarse ni mostrar con soberbia su triunfo. Simplemente ha de celebrarlo como un hito más de su propia historia. Pues este término que disfruta, de 924 kilómetros cuadrados, es un legado de sus antepasados.
¿Adiós al Colegio de San Blas?
Un nuevo Colegio/IES paraCarmona
LO HEMOS CONSEGUIDO!!!
Salvar las urgencias
No quiero ser Diputado Provincial
No quiero ser Diputado Provincial
Nuevamente, el candidato del PP en Carmona basa su campaña personal en arremetidas contra su propio partido y contra algunos de sus compañeros y dirigentes. Son los daños colaterales que está ejerciendo al emplearse en descalificar al alcalde sin argumentos convincentes. Habrán sentido vergüenza ajena los mismos que le acompañaban.
Ahora resulta que ser diputado provincial es una deshonra. Que esta responsabilidad supone un desprestigio ante los ciudadanos por la dedicación que conlleva. “No quiero ser diputado provincial, quiero ser alcalde de Carmona, no quiero ser diputado provincial”, decía una y otra vez nuestro ínclito y afortunado líder, aspirante a la poltrona municipal. Fíjense ustedes, todo lo que este señor ha dicho o silenciado inconscientemente al mismo tiempo con estas palabras proferidas en el mitin del PP:
En primer lugar, no habló para nada del motivo de la convocatoria del acto, que era sobre el referéndum del Estatuto de Autonomía para Andalucía, se equivocó de campaña y creía que estábamos ya en las municipales. Total (esto no es marca de gasolinera), para qué vamos a tratar de Andalucía, si ni siquiera la provincia nos merece atención... Como si una Ciudad estuviese al margen de su contexto territorial y político...
En segundo lugar, cuando alguien dice “yo no quiero” ser esto, está renunciando a algo que puede conseguir. Cuando dice “yo no quiero ser diputado provincial” será porque pudiendo serlo, renuncia a ello... cuanta generosidad por Carmona, ¿no? Sin embargo, la verdad es otra. En esta andadura democrática, desde las primeras elecciones municipales de 1979, el PP no tuvo nunca un diputado provincial en este distrito electoral, al que pertenecen Carmona, Viso, Mairena y la Campana. De los dos asignados a esta circunscripción uno es del PSOE y otro de IU. Por tanto, difícil es renunciar tan generosamente a algo que no se tiene y que, con los datos en la mano, prácticamente es imposible conseguir. Es como la fábula de la zorra y las uvas... “no las quiero, están verdes” decía ella tras el vano intento de cogerlas sin poder alcanzarlas. Sólo que a este animal no se le ocurrió, además, insultar a los de su misma especie...
En tercer lugar. ¿Qué habrán pensado de esta despectiva alusión los alcaldes del PP que son diputados provinciales o andaluces...?. Por ejemplo, Antonino Gallego, alcalde de Bollullos de la Mitación y diputado provincial del PP; o Jesús Calderón, alcalde de Pilas que fue también diputado provincial del PP. O la propia Teófila, alcaldesa de Cádiz y presidenta del grupo parlamentario popular. Anda, Juan, díselo a estos alcaldes y dirigentes de tu partido. Porque a las alcaldesas de Castilleja de la Cuesta y de Tomares, o al alcalde de Fuentes, por citar ejemplos más cercanos, no hace falta que les digas nada, porque son diputados provinciales del PSOE...
La fábula de la zorra y las uvas enseñaba a los niños que los “faroles” que nacen de esa hipócrita apariencia del “quiero y no puedo”, hacen reír incluso a los pájaros. Porque ni las uvas de la Diputación ni las uvas de la alcaldía están maduras, por muchas viviendas asequibles que digas que vas hacer ahora, como las que están haciendo esos socios amigos que van comprando los solares del casco antiguo para luego venderlos a “precios asequibles”... Nos morimos de risa, como los pájaros que miraban a la zorra.
El pregón del Carnaval
Es Carmona Ciudad de pregones y pregoneros. El de Semana Santa, madre de todas las proclamas, va acompañado de otros tantos y sólo recuerdo los de la juventud cofrade, Glorias de María, el Rocío, Cabalgata de Reyes, Feria de Mayo y el del Carnaval (me han salido siete, no debemos olvidar el de los carmonenses residentes en Barcelona). Ante esta diversidad, surgen los lógicos y saludables esfuerzos por conseguir cada cual su espacio de fondo, contenidos, formas y decorados. A veces, así ha ocurrido, parecía que todos imitaban al gran pregón por antonomasia de la Semana Santa... Pero, en la medida que van madurando, si desean sobrevivir en el tiempo, han de mantener una identidad propia en todos los sentidos.
Así ocurre con el Pregón del Carnaval. Debiera ser éste el pregón alternativo por excelencia; no olvidemos que la disputa vital entre Don Carnal y Doña Cuaresma es la expresión de un pulso moral y ético que abarca esencia y existencia, vida y muerte, libertad y culpa... Pues bien, este año podemos decir que hemos asistido a un magnifico pregón porque ha conseguido en fondo y forma ser alternativo, llegar con el mensaje de la propia fiesta a quienes se sienten partícipes de ella y tocar la tecla profunda que llega al inconsciente colectivo. Y me explico.
Por encima de todas las reflexiones y acciones de la vida, mantenemos una infancia prolongada que nos limita como seres libres. La figura del padre, o la de la madre, resuena en nuestra conciencia como consejera y conductora de nuestras vidas. La Semana Santa es, sobre todo, la rememoración de nuestro Padre y de nuestra Madre en un episodio doloroso del que nos sentimos culpables y del que deseamos ser perdonados a cambio del sacrificio, la abstinencia, o simplemente la oración. La alternativa a este pensamiento que late en nuestra conciencia y en nuestra ideología es la liberación definitiva de la figura del padre como jefe superior o la de la madre como protectora eterna... Esta es una de las finalidades del carnaval, mejor dicho, es la misma esencia del carnaval. Mediante una explosión de vitalismo y de libertad, la corporeidad desea ser autónoma e independiente sin más limitaciones que las de la imaginación y la creatividad, sin atender a las recomendaciones moralizantes ni a los reglamentos o normas del poder imperante; manda la crítica frente a la disciplina...
El pregón de Raúl Castro ha sido un intento, estéticamente conseguido, de proyectar la necesaria liberación del padre. En una primera parte del pregón, como cadáver, pone al auditorio carnavalesco ante su propia muerte... y hace una crítica al que algunos consideran padre del carnaval de Carmona, Paco Eslava. Y en una segunda parte, carnaval vivo y sarcástico, va llevando al auditorio por el derrotero de la crítica a todos los títeres con cabeza, ilustres o no, hasta llegar a un punto que el silencio del teatro marcó como el más trascendente, por real y sincero: el futuro del Carnaval está en manos de la propia gente, el Carnaval es la calle y debe ser expresión colectiva y no tutelada... “Teatro y contrato”, dos enfermedades, una la vanidad y otra el dinero, que han carcomido la auténtica esencia de un carnaval de todos, el que ha de ir a los barrios y llegar a la gente, no sólo el concurso y el espectáculo. Es decir, críticas al Ayuntamiento y al alcalde, todas las que quieras, pero ¿críticas al propio mundo del carnaval? ¿Cuándo se han hecho de esta manera?... Ese ha sido el mérito principal de este pregón que, para no faltar a los lugares comunes, tuvo destellos de humor en un cuarteto de tres que sirvió para reivindicar esta figura carnavalesca que tantos años hace que no vemos entre las nuestras... con alardes grotescos al “humor sencillo para el pueblo” frente al “humor inteligente” como recomendaciones didácticas al auditorio, y las consabidas arremetidas contra el alcalde...
Un pregón con las propias contradicciones de la vida, matando al padre al principio, sea éste el propio carnaval, el impulsor de hace veinte años o el mismo dinero, tutela o subvención institucional... Matando al padre al principio, sí, pero elogiando luego, como corresponde al buen hijo, al suyo propio, y a su madre, presentes en el teatro... Así es la vida...
Pregón que comenzó con un entierro y terminó, como es costumbre, con la famosa cabezada tras las bambalinas del escenario, en este caso de felicitaciones al pregonero... Y entre cabezada y cabezada, alguien, claro, decía...Pues éste no es precisamente de los que se disfrazan todos los días del carnaval... Y es que no tenemos arreglo... afortunadamente.