Tras la subida de los sueldos y retribuciones de los concejales y concejalas liberados que el PSOE ha hecho, triplicando el gasto, para mérito y gloria de la hipocresía política, –no olvidemos todo lo que criticaron al anterior gobierno-, ahora plantean al pleno municipal la contratación, en principio, de cuatro asesores para el gobierno municipal. Las concejalías de deportes, servicios sociales, formación y empleo y hasta la propia alcaldía, de prosperar esta iniciativa, tendrían cada una un asesor o asesora más, al coste de 1.600 euros netos al mes más... Si contar con el posible gerente de urbanismo, cargo de confianza también, que habrá de nombrarse en su día (además de los ya nombrados)
Esto nos lleva a pensar, en voz alta, sobre este tema de los asesores... Primero: ¿Qué son los asesores? ¿Son as-censores? Es que, a través del tiempo, van subiendo en el escalafón hasta no se sabe dónde... Recuerden el caso de Maribel Montaño, asesora de Cultura en Diputación y hoy en el Ayuntamiento de Sevilla, llevando los temas de Cultura... y parlamentaria... ¿Son a-sexo-res?, juego de palabras que aquí se manifiesta con la intención de hacer reflexionar sobre el papel ”asexuado” de los asesores, ya que han de ser, según la teoría de Maquiavelo, objetivos, decir la verdad por encima de los intereses del poder y “asexuados”, es decir, no casarse con nadie... No. Quizás mejor, son “a-seso-res”, de seso, es decir cerebro, y res, cosa; o sea, trabajadores del pensamiento (cerebro) de la cosa (el pueblo, sus intereses)... La verdad es que siempre han hecho falta asesores cuando los que tenían que tomar la decisiones, inmersos en el mar de las dudas, necesitaban mentes preclaras que le orientasen..., ¿Es este el caso?..
Cuatro asesores, cuatro, además de los ya existentes, cargos de confianza, que sólo tienen que demostrar, para acceder al puesto que son, eso, de confianza (con-fianza), o sea, de la familia, “de los nuestros”... Entonces... ¿Será que “los nuestros” necesitamos más cargos, eso que llamamos el pesebre, eso que se dice, “la cosa nostra”?
Cuando salen tantos asesores, no nos engañemos, es, casi siempre, por dos causas principales: Una: O bien los que ostentan el poder político no saben y tienen que ser enseñados.. U Otra, los que están abajo necesitan ser colocados... Lo demás suele ser hojarasca dialéctica. Y si los que ostentan el poder político no saben, ¿Cómo es .-en el caso de Carmona- que se pusieron sueldos de nivel superior? Si no saben, no pueden ganar tanto, y si saben no necesitan tantos asesores, ya que están liberados...
En el caso de nuestro Ayuntamiento, se dan las dos circunstancias: Hay concejales/as que no saben y necesitan que alguien les eche una mano, sin renunciar a sus suculentos sueldazos, claro... Y, además, hay que colocar gente. El PSOE en todos los sitios que ostenta el poder, ha procurado establecer una red clientelar, conformada por gente de su partido y familiares, para conseguir un “ejército” militante que defienda sus posiciones electorales en todos los comicios. Para eso se ha servido de las instituciones, sea la Junta, Diputación, Ayuntamientos...
Por eso, resulta extraño que, en este caso, el PP no tenga una postura manifiestamente clara. Da la impresión que los populares del ayuntamiento de Carmona no son capaces de concretar en Carmona lo que su partido critica en el ámbito andaluz a la Junta de Andalucía, cuando se refieren a tantos cargos de confianza y altos cargos que Chaves pone a su servicio y al de su partido. Ya sabemos que en todos los partidos se dan casos similares, pero no en la misma magnitud, no con la misma intensidad, en el caso del PSOE en Andalucía, es una forma de “ser”, de “actuar”, de “sobrevivir”.
Si el PP, por las circunstancias que fueren, mira para otro lado, y deja que el gobierno municipal siga en esa línea de incrementar personal de confianza para trabajar para su partido, y, con su abstención facilita la progresión geométrica del abuso clientelar, estará haciendo un flaco servicio a su partido y a su Ciudad. Porque, en el fondo, estará favoreciendo un modelo de sociedad dependiente, inactivo, conceptualmente pro-régimen y, en definitivca, caduco... Así que ya veremos lo que hacen.